Llámanos

Tania Hurwitz

 

A través del modelado en barro, retrato uno de los momentos más placenteros y cotidianos que una madre pueda tener con un hijo o hija.  La técnica es Raku Yaki, el vidriado contiene óxido de cobre el cual da efectos que me recuerdan a los colores de las auras, esa energía que emana de un cuerpo y que es invisible al ojo humano. Me interesa volver permanente un momento. Con este proceso materializo la energía que fluye en ese instante entre esos dos cuerpos, la coyuntura entre dos miradas que emanan amor.